Hasta fines los a帽os 80, la mayor铆a de expertos pensaban que, con los niveles que se registraban en la mayor铆a de las ciudades de los pa铆ses m谩s desarrollados, la contaminaci贸n atmosf茅rica no era un peligro importante para la salud, y alentaban a que se profundizaran las investigaciones mediante la implementaci贸n de planes y programas de monitoreo y evaluaci贸n de la calidad del aire.
La situaci贸n ha cambiado: desde los 90 el consenso internacional reconoce que la inhalaci贸n de contaminantes, especialmente de part铆culas finas, representa un aumento de riesgo de defunci贸n prematura.
El an谩lisis que en principio se centr贸 en los efectos agudos o a corto plazo, fue variando a la luz de los nuevos estudios, hacia la consideraci贸n de los efectos debidos a la exposici贸n cr贸nica, siendo 茅stos reflejados por la reducci贸n de la esperanza de vida y el aumento de la morbilidad, enfatizando la obligaci贸n de liderazgo del Sector Salud en la promoci贸n de las condiciones para que la poblaci贸n tenga garantizado su derecho al aire puro.
El Ministerio Salud de la Naci贸n ha liderado la preocupaci贸n nacional por la calidad del aire desde la d茅cada del 70 (algunos hitos son el inicio del Programa de Evaluaci贸n y Control de la Calidad del Aire, integrante de la red PANAIRE de la OPS -1972-; la integraci贸n del Programa al proyecto GEMS-Aire de la OMS -1987; la incorporaci贸n de estrategias de evaluaci贸n y manejo de riesgos -1993-, la incorporaci贸n al proyecto AMIS/GEMS- Aire de la OMS -1998; la constituci贸n la Red Nacional de Calidad del Aire y Salud, incluyendo una Red de Laboratorios de Calidad de Aire y una Red de Profesionales de la Salud Ambiental en los 90, y la creaci贸n del Programa de Calidad de Aire y Salud - Prevenci贸n de riesgos para la salud por exposici贸n a contaminaci贸n atmosf茅rica mediante Resoluci贸n Ministerial N掳 638/2001).
La Argentina es un pa铆s federal en el que las autoridades locales son responsables de la preservaci贸n de los recursos naturales, reservando al gobierno federal el establecimiento de condiciones rectoras de cumplimiento obligatorio. Ello ha determinado el rol referencial del Programa Nacional que se manifestado de diversas maneras, tales como:
prestar asesoramiento a municipios y provincias para la elaboraci贸n de Programas de Calidad de Aire y Salud en el nivel local,
recopilar, consolidar y remitir al Banco Mundial de Datos GEMS/Aire los datos de monitoreo de la calidad del aire obtenidos por la Red de Laboratorios de Calidad del Aire, proveer insumos a los laboratorios de la Red a fin de apoyar su funcionamiento y asegurar la continuidad en la recolecci贸n de informaci贸n y, realizar talleres nacionales y regionales sobre diversos aspectos de la evaluaci贸n y manejo de riesgos por exposici贸n a contaminantes atmosf茅ricos con la participaci贸n de profesionales y t茅cnicos de provincias y municipios, tareas estas que se han desarrollado fundamentalmente hasta comienzos de siglo sentando las bases para los desarrollos locales.
En paralelo el Programa tom贸, en l铆nea con las recomendaciones de OPS y OMS, la iniciativa de promover la preocupaci贸n por la calidad del aire intradomiciliario que, como sabemos, depende de los materiales de construcci贸n de la vivienda, la correcta planificaci贸n de su ventilaci贸n, el grado de hacinamiento, el tabaquismo pasivo y activo de sus habitantes, la calidad del aire exterior infiltrado, el uso adecuado de combustibles para calefacci贸n y cocci贸n de alimentos, el uso de diversos aerosoles, limpiadores y plaguicidas dom茅sticos, entre otros productos y la presencia de plantas de interior, mascotas, alfombras y toda superficie h煤meda, que puede contribuir a la aparici贸n de m煤ltiples alerg茅nos, a trav茅s de hongos, plumas, pelos de animales, 谩caros, etc. Esta tem谩tica fue tambi茅n eje de m煤ltiples actividades en diversas localidades del pa铆s.
